NuevoMilenio 
Personaje de mi Pueblo
Jaral del Progreso, Gto. – En nuestro querido municipio, hay nombres que resuenan con cariño y respeto. Uno de ellos es el de José Luis Hernández, aunque para todos en Jaral es simplemente “El amigo Pata”. Rotulista de corazón, pero aún más apasionado por la música ancestral y la danza autóctona, es un personaje que ha dejado huella en nuestra comunidad.
Hoy queremos rendir homenaje a este hombre que, con humildad y talento, ha dedicado su vida a preservar las raíces culturales de nuestro pueblo. A través de su arte, su oficio y su entrega, Pata ha sido un puente entre el pasado y el presente, manteniendo viva la historia, la tradición y la enseñanza de nuestros ancestros.
✍️ Letras con alma: su pasión por el rotulismo
Con más de 20 años de trayectoria como rotulista, José Luis ha embellecido cada rincón del municipio con su trabajo. “Amo las letras, es mi pasión”, afirma con orgullo. Su amor por el dibujo y la pintura nació gracias a su tío, el querido Profe Lole, a quien observaba mientras rotulaba, aprendiendo con cada trazo.
Su talento tomó forma en la secundaria Ignacio Zaragoza, bajo la guía del maestro Felipe, quien le enseñó dibujo allá por el año 1984. Desde entonces, su oficio no solo le ha permitido expresarse artísticamente, sino también sostener a su familia: su esposa y sus tres hijos.
Antes de convertirse en el rotulista oficial de la presidencia municipal, Pata trabajó como albañil y como guardia de seguridad en el centro de salud. Hoy, a sus 55 años, cuenta con un empleo estable, encargado de rotular y elaborar señalética para todo el municipio.
🪶 Danzante y músico: alma de nuestras tradiciones
Pero su legado va más allá del rotulismo. José Luis es también artesano, danzante y fundador del grupo de música ancestral “Los Enviados del Mixtlán”, donde comparte su amor por las raíces prehispánicas y la espiritualidad de nuestros pueblos originarios.
Su compromiso con la cultura es profundo y auténtico. Cada danza, cada melodía, cada pieza artesanal que crea, es una ofrenda a la memoria de quienes nos precedieron.
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Gracias, amigo Pata, por tu entrega, tu arte y tu amor por Jaral del Progreso. Tu vida es un ejemplo de cómo se puede honrar el pasado mientras se construye el presente. ¡Que tu legado siga inspirando a las nuevas generaciones!
